El TPP y lo que le sigue
Como muchos han leído o escuchado en las noticias, los países firmantes del Acuerdo Transpacífico de Asociación Económica (TPP por sus siglas en Ingles) juntos representan el 40% del PIB mundial y un tercio del comercio mundial. Por lo cual esto lo catapulta automáticamente en uno de los Acuerdos Comerciales más ambiciosos de las últimas décadas. Y esto aún más, por el hecho de que Estados Unidos busca obtener más cuota del mercado y abaratar sus ventas, ya que como hemos visto en los últimos años China ha crecido en demasía su economía y su comercio. E.U.A. no desea que China compita directamente con él, y Obama, antes de salir de su periodo presidencial desea que se ratifique lo más antes posible. Existen muchas especulaciones en internet sobre este acuerdo, y entre tantas tenemos el texto que se filtró en la Webpage Wikileaks, el cual asegura que las patentes de ciertas medicinas se extiendan por más años, esto para beneficiar a las multinacionales farmacéuticas o también donde supuestamente se desea extender el plazo de los derechos de autor y evitar que dicha obra pase a ser de dominio público. En honor a la verdad, cualquier acuerdo comercial, y aún más uno multilateral como el que tenemos a la puerta: TPP, debe de ser de libre mercado, no solo para las empresas involucradas, sino aún más, para los consumidores finales, los cuales deben ser los verdaderos beneficiados. Desde mi muy personal punto de vista, considero que muchas especulaciones que ronda en la red son muy negativas, y claro no dudo que muchas grandes transnacionales quieran ser las beneficiadas, pero lo que si hay que entender es que deben haber mayor intercambio y mayor acceso a las necesidades de los consumidores, sin olvidar que los derechos deben ser protegidos como en este caso los derechos de autor. También no hay que olvidar que como en cualquier otro tratado, México puede declarar reservas, hay que esperar que nuestras autoridades ratificadoras, en este caso, el Senado, se reserven de ratificar algún artículo prejuicioso para nuestros consumidores nacionales.
También considero, que si bien, este Acuerdo es beneficioso para México, ya que supone el intercambio comercial con países asiáticos, de los cuales solo tenemos a un socio anterior: Japón, en cual el tratado con él no es muy libre, y la verdad de las cosas es que México debe expandir su mercado, son tantos años del NAFTA y hasta la fecha no ha sido muy provechoso para nosotros. Asimismo, creo que los acuerdo comerciales de este siglo, se han convertido, como lo dijo un columnista en El Economista, en neo-mercantilismo, en el cual los países solo quieren tener superávit y el déficit es malo, sin tomar en cuenta que el propósito de los acuerdo no es una lucha entre balanza de pagos, sino que sus consumidores, las personas que compran sean las beneficiadas, que sus gastos familiares sean más bajos.
Sera difícil cambiar la mentalidad de nuestros gobernantes, incluso una hazaña casi imposible, pero aliento a los que leen este articulo a estar cada vez más informados sobre estos temas ya que son los que repercuten en nuestro día a día, no están alejados de nuestra realidad, y en cuanto a nuestro Senado, esperemos sean lo suficientemente capaces para discernir y ratificar los beneficioso y ventajoso para nuestra nación.
